Conciliación y el virus ‘real’ que nos está desnudando

Reivindico la importancia de trabajar por una conciliación real, efectiva y para todas las personas, compartiendo mis mejores referentes en este objetivo.
Tania CaMon

Tania CaMon

Vamos a encontrar el equilibrio entre todas las áreas de tu vida.

Comparte el post

Desde hace un par de años hoy, 23 de marzo, se celebra el Día Nacional de la Conciliación. Y este año toca conmemorarlo en medio de la crisis mundial en la que estamos sumergidos. El nombre es cuanto menos curioso, corona-virus, un virus ‘real’ que ha llegado para obligarnos a hacer lo que estamos hartos de leer en redes y hasta en los sobres de azúcar del café que ponen en esas cafeterías a las que vamos a tardar semanas en volver.

Parar, stop, por decreto además. Si hace poco tiempo nos hubieran dicho que en comparecencia oficial el presidente del gobierno nos iba a obligar a quedarnos en casa, confinados, nos hubiéramos reído. Pero eso ya ha pasado a formar parte de nuestras vidas, de momento, para un mes.

Y nos desconcierta, y como todo lo que genera incertidumbre, nos da miedo. Y como todo lo que nos da miedo, nos genera rechazo. Y como todo lo que genera rechazo, se polariza. Y ahí entramos en los dos polos opuestos: tomárselo a cachondeo hasta llevarlo al ridículo; o entrar en pánico, y compartirlo, desprendiendo energía negativa. Y probablemente cada uno de nosotros hemos pasado por todo el arco iris de estados en estos más de 10 días de confinamiento obligatorio. Encontrar el equilibrio en medio de todo esto es un reto que me he propuesto conseguir.

Es paradójico como sin salir de casa se puede sentir más ruido e interferencias que en plena Gran Vía madrileña en hora punta de cualquier día laborable hasta hace 2 semanas. Y yo me siento abrumada, muy abrumada. Por un lado, podría ser la perfecta oportunidad de poner al día todas las cosas que siempre dejamos para luego. Pero es difícil porque no es un estado de parón elegido, sino un estado de alerta que nos está obligando a la supervivencia más salvaje, al más puro estilo de las historias de nuestros abuelos cuando nos hablaban de la guerra.

Pero, a pesar de todo el ruido, y de que quizá todos estamos preocupados por la situación actual y la que se nos viene, no he querido dejar pasar este día sin recordar algo que para mí es tan importante. Así que recordar la importancia de trabajar por una conciliación real, efectiva y para todas las personas, ha sido el motor para retomar este blog que llevo semanas posponiendo.

Porque una de las principales consecuencias que nos ha traído a todos la nueva situación, es la de que las empresas con posibilidad de continuar con su actividad, se han visto obligadas a establecer el teletrabajo, independientemente de la consideración previa que tuvieran sobre él. Adoptarlo como mal menor y necesario.

Y si hasta ahora, no he parado de reivindicar que no se podía simplificar el concepto de conciliación a la posibilidad de maternar manteniendo el puesto de trabajo; ahora temo que los enemigos de ella, aprovechen para afirmar que probado el teletrabajo como medida de conciliación, se ha hecho evidente que no funciona.

No estamos teletrabajando, estamos sobreviviendo. Y esto no se nos puede olvidar. Pero habrá un día, espero que pronto, que esta pesadilla quede atrás, y entonces será el momento de reflexionar sobre los aprendizajes que esta situación de confinamiento nos ha dejado. También en lo que a liderazgo y a gestión de equipos se refiere. Y, por supuesto, será momento de trabajar, aún más duro si cabe, por la conciliación.

Y como para todo en la vida, no hay nada como rodearse de los mejores referentes, personas y entidades que llevan ventaja y que tienen mucho que aportar. Será el momento de escucharles y copiar. Sí, sí, copiar las fórmulas exitosas de conciliación que ya existen, y trabajar juntos para seguir mejorando.

En mi caso, tengo 3 referentes clave, y no podía pasar el día de hoy sin agradecerles y reconocerles su trabajo, en lo que a conciliación se refiere:

  • Fundación Más Familia: tuve la suerte de conocer su labor en 2014, durante la baja maternal de mi segunda hija, justo en el año cuando diagnosticaron también Alzheimer de inicio precoz a mi madre, y se me ofreció la posibilidad de promocionar laboralmente. Todo un reto hacer frente a todas estas circunstancias a la vez, que voy superando día a día los últimos 6 años. Con el tiempo he tenido la suerte de poner caras y nombres. De formarme como manager efr con ellos y de trabajar su certificación en conciliación personal, familiar y laboral. Roberto, Isabel, Beatriz, Marisa y el resto del equipo, que diariamente trabajan por demostrar que con voluntad, con interés y sobre todo, con un nuevo estilo de liderazgo, la conciliación es posible en cualquier organización, independientemente de su tamaño, de su sector o de su nivel de facturación. Es un regalo compartir y trabajar con ellos, y desde luego, son unos compañeros de viaje imprescindibles para entender  e instaurar la conciliación en las empresas.
  • Club de Malasmadres: más allá de sus productos, que fue el principio, pero que a día de hoy yo entiendo más como un vehículo que sirve para generar comunidad de mujeres (y hombres) que luchan por la conciliación sin tener que renunciar. Y en concreto, la labor que realizan desde su Asociación Yo No Renuncio, con la líder Laura a la cabeza, pero con un equipo, como Maite, a la que tuve también oportunidad de conocer en un evento de Extraordinaria el año pasado. Sin duda, otras imprescindibles en este propósito. Personas comprometidas como ellas son las que hay que tener cerca, y lo demuestran día a día, y en toda su actividad, también la comercial, como por ejemplo, como otros muchos pequeños emprendedores y emprendedoras, que a diferencia de las grandes marcas, han suspendido el comercio online en estas semanas. Espero que nos acordemos de ellos cuando todo esto pase.
  • David Tomás, fundador de Cyberclick: aunque él no trabaja la conciliación de manera directa, su estilo de liderazgo y de gestión de equipo es la muestra evidente de que se puede conseguir el equilibrio entre una organización rentable y productiva con un equipo de trabajo motivado y feliz. Aunque ya os he hablado de ellos en otras ocasiones, os recomiendo sus dos libros ‘La empresa más feliz del mundo‘ y  ‘Diario de un millenial‘. Es el único al que todavía no he conseguido desvirtualizar, pero espero poder hacerlo algún día.

Todos ellos son mi inspiración y mi esperanza de que la Conciliación es posible y alcanzable para todos aquellos que la incorporen en la filosofía de sus organizaciones, no como estrategia de marketing, sino como pilar transversal para la empresa y la gestión de personas. Es más, creo que todas las organizaciones y las personas que apuesten por ella, adquirirán ventaja competitiva con respecto al resto. ¿Quieres ser uno de ellos?

¿Tienes algún referente en materia de conciliación que quieras compartir conmigo?

Hoy más que nunca, feliz día de trabajo por la conciliación.

Os leo en comentarios.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

TANIA CAMON será responsable de tus datos, se enviarán a Webempresa para poder responder tu comentario. Este tratamiento se hace en base a tu consentimiento. Deberás entender que esta información es pública, y los datos que coloques en este formulario los leerá cualquier visitante de este sitio web. Conservaré esta información por el tiempo que dure esta entrada del blog o hasta que tú decidas eliminar el comentario. Puedes ejercer cualquier derecho que tengas relacionado con la protección de tus datos según se describe en la política de privacidad.